El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reiteró hoy que la reforma educacional impuesta a la fuerza por el exmandatario Enrique Peña Nieto, será abrogada en su totalidad.
De esa manera el ejecutivo responde a exigencias de la Sección 22 del magisterio en Oaxaca que piden esa acción aun cuando López Obrador siempre ha insistido en su eliminación total.
Se va a abrogar la mal llamada reforma porque no quiero que utilicen de excusa que queden pendientes algunos aspectos para sacar provecho personal pues por ahí andan viendo sin incumplimos y se frotan las manos porque creen que van a poder decir que somos iguales a los gobiernos anteriores, o para que tengan motivos a seguir en sus actividades.
Pero aquí, advirtió, se va a aclarar todo, y afirmó que dio la instrucción al secretario de Educación de que no quede nada de la mal llamada reforma educativa, primero por justicia porque fue indebido lo que hicieron, es decir, aplicaron una política ordenada desde el extranjero para desprestigiar al magisterio que nada tiene que ver con mejorar la enseñanza.
Fue algo impuesto que en lugar de ayuda perjudicó, por eso hay que cancelarla, pero también para que no haya pretextos que no haya excusas, pues ahora hasta los que aplaudieron la mal llamada reforma están muy radicales.
Hasta los que solaparon aquel agravio al magisterio del gobierno anterior, ahora que estamos planteando que las cosas sea distintas, que se dignifique el sector en beneficio de los maestros y maestras, están queriendo oponerse y que no lleguemos a ningún acuerdo.
Vamos a arreglar las cosas, prometió, y también decir que hay libertad sindical, y democracia sindical. Ya estoy reservando mi lugar en primera fila porque quiero ver las elecciones internas, quiero ver a los maestros votando por primera vez sin amenazas, con democracia pues ya no hay sindicatos predilectos del gobierno, ni partidos, ni grupos, y van a ser los maestros quienes decidan, sin manipulación.