Desde que se declararon medidas de distanciamiento físico para disminuir el contagio del virus COVID 19, los sindicatos de la Internacional de la Educación han señalado la importancia de que las soluciones digitales y tecnológicas que se utilicen en el sector educativo sean de carácter público, estatal y gratuito.
El magisterio reconoce el valor de poder contar con herramientas digitales adaptadas a las necesidades reales de la educación pública y que sean diseñadas con la participación de las personas docentes que las van a implementar. Para ello, es clave que los Estados diseñen estrategias de desarrollo de tecnologías y soluciones digitales impulsadas con actores públicos, -por ejemplo universidades- y financiadas con fondos públicos.
No obstante, la tónica a nivel mundial parece ser la de obviar las soluciones con mirada estatal y ceder el espacio a las corporaciones tecnológica cuyos negocios están vinculados al desarrollo de tecnologías y soluciones digitales.
Un ejemplo es el Sistema de Naciones Unidas que está abriendo el portillo para que las corporaciones marquen la pauta en la política educativa educativa en modalidad virtual. En el mes de marzo del 2020 la UNESCO convocó de “urgencia a los dirigentes de las alianzas multilaterales de la educación para proporcionar una respuesta educativa a la pandemia del Covid-19” (UNESCO, 2020), y se configura la Coalición Mundial para la Educación en respuesta al COVID 19, con el lema “el aprendizaje nunca se detiene”.
En esta convocatoria participaron la ACNUR, el Banco Mundial, la Comisión de Educación (Education Comission), la Dirección General de Cooperación Internacional y Desarrollo de la Comisión Europea, Education Cannot Wait, la Campaña Mundial por la Educación (GPE), la OCDE, la OIT, ONU-Mujeres, PMA, UNESCO y UNICEF.
Además, en esta Coalición participan ONG´s y transnacionales de la tecnología como Microsoft, Google y Facebook, Khan Adacemy y PRO FUTURO, el proyecto de la Fundación Telefónica, la transnacional de telecomunicaciones Telefónica Movistar. Este llamado de la UNESCO sienta en la mesa de decisiones educativas a las transnacionales de telecomunicaciones y a las corporaciones privadas que lucran con negocios digitales.
La Agenda de la Comisión
La comisión se ha planteado tres ejes de trabajo:
- Hacer de la conectividad universal una realidad.
- Empoderamiento de docentes y protección de su status.
- Perspectiva de género (UNESCO, 2020).
Estos tres ejes en sí mismos no contradicen el derecho a la educación pública. Es más bien la forma en que se le quiere dar respuesta a estos tres ejes lo que genera una fuerte comercialización y una oleada de lucro privado a costas de la educación pública.
¿Por qué?
1. Porque para proveer conectividad universal la UNESCO propone Alianzas con empresas de telecomunicación para proveer servicios de internet, el desarrollo de capacidades de los ministerios de educación, docentes y estudiantes para la educación a distancia y el impulso de políticas para declarar la conectividad como un elemento del derecho a la educación.
También propone generar procesos de investigación basada en UNESCO, además promueve difundir resultados de las evaluaciones a docentes como una forma de demostrar la efectividad de las plataformas digitales, esta iniciativa se complementaría con “campañas de apoyo a la profesión docente y difusión de datos y de análisis de los logros”. Datos (big data) para entender el impacto de la educación a distancia.
2. Porque para fortalecer las capacidades docentes para la mediación en ambientes virtuales, la UNESCO propone procesos de capacitaciones docentes a gran escala para adquirir habilidades de mediación pedagógica en la modalidad virtual. Para esto la UNESCO exhorta a que proveedores de cursos en línea (MOOCs por las siglas en inglés de Massive Open Online Courses) y corporaciones de la industria de la tecnología educativa (ed-tech) jueguen un papel central. El llamado de generar capacitación a docentes de forma masiva e inmediata puede ser contradictorio a fortalecer una oferta pública y estatal de capacitación y actualización del personal docente.
En el marco de esta Coalición en respuesta a la pandemia, se suscribe un Convenio con la fundación PRO FUTURO para que la Fundación ponga a disposición sus más de 160 cursos digitales de educación en línea. UNESCO considera esto como un gran aporte, pues la Fundación proveerá materiales ya digitalizados a docentes, estudiantes y a sus familias (UNESCO, 2020). Profuturo ya desarrollaba proyectos centrados en la educación digital, elaborando contenidos educativos e invirtiendo en infraestructura digital. En Costa Rica, por ejemplo, PROFUTURO anunció la donación de USD 1 000 000 (un millón de dólares) para la compra del equipo tecnológico y al desarrollo profesional y acompañamiento cercano de docentes para la” innovación educativa”.
El OLPE ya ha advertido sobre los riesgos de que la formación docente quede en manos de corporaciones privadas, así como el diseño de los procesos de mediación pedagógica y los contenidos educativos.
UNESCO (2020) Coalición Global por la Educación en respuesta al COVID
Tomado de https://en.unesco.org/news/unesco-rallies-international-organizations-civil-society-and-private-sector-partners-broad