Diario El Nuevo Diario (30/6/2014) El ministro de Educación, Carlos Amarante Baret, aseguró que la Revolución Educativa que ejecuta el Gobierno, con la puesta en marcha de la Jornada de Tanda Extendida, apuesta por la dignificación de la vida de los maestros dominicanos, un compromiso asumido con la firma del Pacto Educativo.
Durante un discurso pronunciado en ocasión del Día del Maestro en el Hotel Hilton donde se celebró un acto de reconocimientos a la Excelencia Magisterial, Amarante Baret dijo que el Ministerio trabaja conjuntamente con la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) para mejorar la vida del maestro.
“Nosotros cada día vamos a ser más exigentes en términos del cumplimiento del deber del horario y calendario escolar, que la docencia no se interrumpa, pero al mismo tiempo tenemos que auto-exigirnos el cumplimiento del deber nuestro, que es propiciar mejores condiciones de vida a todos los maestros y maestras de la República Dominicana y, en eso estamos en este momento”, afirmó el Ministro.
Agregó que “nosotros queremos un maestro y una maestra que viva mejor en nuestro país, porque si vive mejor puede impartir docencia con más libertad, con más tranquilidad y podrá aprovechar mejor la capacitación que el Ministerio, a través del INAFOCAM (Instituto Nacional de Formación Magisterial) y el ISFODOSU (Instituto Superior de Formación Docente Salomé Ureña) les ofrece, y a aquellos que desde el bachillerato deciden optar por tan hermosa carrera”.
En referencia a los maestros y maestras, indicó que aunque la Revolución Educativa se centra en la familia, estudiantes, personal de apoyo y en los actores que desde la sociedad acompañan en la lucha por mejorar la educación dominicana, tiene como actor determinante al maestro y la maestra “porque no hay Revolución Educativa y no hay presente ni futuro promisorio sin la decisión firme, sin la voluntad inquebrantable de todos ustedes de forjar a un mejor ciudadano en la República Dominicana”.
Al destacar la vocación y el sacerdocio de los maestros, Amarante Baret dijo que son ellos los que desarrollan el proceso que debe llevar a los niños y adolescentes a crecer con una visión crítica de la sociedad, y a forjar la Patria en las aulas de las escuelas.
Aprovechó la celebración para recordar a los maestros y maestras que aunque no están físicamente, consagraron su vida a enseñar, a educar y a forjar al nuevo ciudadano del país, como Pedro Henríquez Ureña y Juan Bosch.
“Hay que recordar a los grandes maestros que nos formaron a nosotros, tenerlos en nuestras memorias siempre, y que ellos se constituyan en un faro que nos guíen en este camino de lograr una educación de calidad para todos y todas en la República Dominicana”, dijo.
En su discurso, el funcionario destacó que después de muchas luchas y gracias a la visión y compromiso del presidente de la República, licenciado Danilo Medina, se hizo realidad el 4% del Producto Interno Bruto para la educación, el cual está en su segundo año de aplicación.
Precisó, además, que en este año escolar que concluye, unos 192 mil estudiantes y una cantidad importante de maestros, maestras y personal de apoyo han estado en unos 569 centros de Jornada de Tanda Extendida. Aseguró que para el año lectivo que inicia en agosto venidero se va a multiplicar la cantidad de estudiantes, de aulas y de maestros que irán a la JTE, que definió como el nuevo paradigma de la educación dominicana.
Amarante Baret resaltó que el modelo educativo de Finlandia provocó en 20 años que la carrera universitaria de más prestigio y mejor pagada en esa nación fuera el magisterio nacional.
“Entonces, nosotros queremos, y es la voluntad del señor presidente de la República en este mandato presidencial, cumplir su compromiso, honrar su palabra de tener a un maestro con mejores condiciones de vida en el sistema educativo dominicano”, apuntó.
Amarante Baret abogó por hacer cambios en los próximos años para la celebración del Día del Maestro, y aparte de este acto de premiación, el Ministerio debe involucrarse, además, en las festividades que se realicen en las provincias.